Ay! con esos Pensamientos...

Hay un proverbio que dice "El pensamiento es creativo y produce resultados", con lo cual se deduce que los pensamientos crean realidades.

Y si eso es así dirán algunos, ¿por qué entonces no tengo el empleo espectacular que quiero? ¿por qué no tengo un carro último modelo y ando en el metro aplastado como sardina en lata? ¿por qué ando juntando medios para completar un bolívar? o ¿por qué no puedo comprar las cosas que deseo? Y así, podría ser infinita la lista de los porqué.

Hay una explicación no tan complicada para esto, y se llama patrones de creencias, esas cosas que nos meten en la cabeza desde que somos niños y que producen en nosotros formas de pensar de las cuales muchas veces no somos conscientes.

Pero ¿cómo logran que tengamos creencias que a la larga resultan negativas?

Nada más recuerden las cosas que hemos escuchado toda la vida, esos refranes que nuestras madres, padres, familiares, afines y conexos repetían a la mínima oportunidad, y que asumíamos como verdades absolutas. Cosas como esta: "De lo bueno poco", ¿qué tal? Esta es la máxima expresión de la escasez porque si de lo bueno poco, entonces de lo malo mucho ¿no? Es decir somos más dignos en la medida en que de lo que más tenemos sea de lo malo.Con esa bala metida en la cabeza ¿quién va a pensar en la abundancia? Pues nadie, no vaya a ser que vayamos derechito al infierno...

Aquí les va otra: "Después de un buen gusto un gran disgusto" ¿Quién no ha escuchado o dicho esta frase alguna vez en su vida? Todos lo hemos hecho, y sin darnos cuenta estamos generando, una vez más, escasez en nuestra vida, al no permitirnos crear situaciones placenteras, fluídas y positivas pues corremos el riesgo de que el precio a pagar sea muy alto...

Esta misma frase, va de la mano de la que dice: "después de reir mucho, seguro llorarás". Aquí es la culpa la emoción que nos siembran, pues cuando me vea llorando voy a pensar que fue porque disfruté muchísimo una situación previa y ahora estoy pagando las consecuencias, razón por la cual me siento culpable, así que para evitar la culpa, voy a crear cada vez menos situaciones que sean agradables...

Y estas de las peores: "el dinero es sucio" , "ser rico es malo". ¿Les suenan familiares? ¿Cuántas veces los mandaron a lavarse las manos después de haber estado jugando con las monedas que guardaban en el cochinito, o cuando alguien les daba dinero? no sin antes soltarles la retahíla aquella de: "quién sabe por cuántas manos habrán pasado esos billetes, deben tener cualquier bicho o cualquier microbio y tú jugando con ellos"...

Y así crecimos, con esa creencia sobre el dinero. ¿Creen que alguien va a querer tener microbios en su organismo? Claro que no, así que mientras menos manipulemos el dinero mejor. Y con esa pauta inconsciente, el dinero será lo que menos se nos acerque, lo que menos creemos en nuestra vida...

Definitivamente somos lo que pensamos, así que es bueno prestar atención a las cosas que nos pasan por la cabeza y comenzar a generar pensamientos positivos, acordes con la realidad que queremos y merecemos para nosotros...